lunes, 30 de octubre de 2017

28 de octubre del 2017 - Ultra trail de Monduber













El sábado corrí la Moduber trail,

66kms y 3400 de desnivel positivo y otros tantos negativos.
Había dos motivos para hacerla. La primera porque la prueba se celebra muy cerquita de Gandía, en el pico de Monduber que es donde yo suelo entrenar cuando estoy por allí. Hasta este año la ultra era superior a 80 kilómetros y francamente pienso que son muchos kilómetros para la sierra que hay allí.
Este año la han bajado a 66 kilómetros y aunque son muchos es algo más razonable.
El segundo motivo son los 4 puntos itra que dan y de los que ando escasos.
El objetivo era simplemente acabar, disfrutar del recorrido y llevarme una buena experiencia.
Estoy ahora mismo preparando carreras de 10 kilómetros en asfalto y excepto hace 15 días que subí a la montaña una vez no había pisado montaña desde principios de agosto que fui a correr el cto. de España por clubs en Vistabella (donde me lesione y estuve 7 semanas sin calzarme unas zapatillas de correr).

El viernes día 27 después del trabajo me fui en coche (solo) a Gandía, pasé por casa a dejar la bolsa y a continuación a Xeraco a recoger la bolsa del corredor junto al dorsal. Buen ambiente y este ambiente deportivo me motiva al 100%. Tras recoger el material vuelvo a Gandía donde compro cena y desayuno (para desayunar una paellita :-)).

Un paseíto por la playa para descargar las piernas tras el viaje y luego a dormir. Me levanto a las 03:30am, me como la paella y me vuelvo a meter en la cama hasta poco antes de las 05:00. Me visto y como lo tengo todo ya listo para la carrera tomo carretera a Xeraco donde llego 5 minutos más tarde.

La carrera sale a las 06:10 y como es normal sigue siendo de noche. La carrera da comienzo y yo me quedo más o menos a mitad del pelotón. El ritmo es bastante alto y me sorprende (como siempre) pero decido seguir un poco así. Tras un par de kilómetros tomamos ya montaña y a la primera de cambio nos perdemos. Por suerte era de los últimos del grupo y me toca retroceder menos que los que iban por delante. La verdad es que las balizas brillan por su ausencia en casi todo el recorrido, cosa que hace que haya que ir muy atentos. A priori eso no me molesta y casi lo prefiero a las carreras donde balizan cada 10 metros. Lo que no me gusta es que no marquen cuando te cambian de senda o cuando hay un cruce y no sabes por donde seguir.

En el kilómetro 8 aprox, por Xeresa y antes del avituallamiento del km9.5 me encuentro con un chaval con ganas de hablar. Vamos al mismo ritmo y parece un chico supermajo y un poco a propósito nos esperamos en el avituallamiento. Correr con alguien de noche siempre es mejor que correr solo.

Pasan los kilómetros, amanece y seguimos juntos. Ninguno de los dos tenemos objetivo excepto disfrutar de la prueba y acabarla con lo que decidimos seguir unidos. Un acierto total ya que nos pudimos ayudar mutuamente durante la prueba. El ritmo que nos marcamos era para intentar acabar antes de anochecer y eso lo veíamos bastante posible sin necesidad de llevar nuestros cuerpos al límite. Ambos tenemos que seguir con nuestros entrenamientos la semana siguiente y se trataba de llegar a meta lo más enteros posibles.

Capitan - Capi, de Tavernes de Valldigna, y yo fuimos juntos todo el camino. Al tran-tran y partiendo de posiciones muy atrasadas fuimos cogiendo a gente durante todo el recorrido. Solo nos adelantó un chico al final pero a este le pudimos alcanzar en los últimos kilómetros de carrera.

El recorrido muy rompe piernas, constantes subidas y bajadas, mucho matorral que dejaban la piel a flor de piel (y eso que llevaba compresivas justo para esto). Mucha zona que costaba correr por las piedras. Eche en falta un poco más de variedad en el terreno, Todas las subidas cortas pero pronunciadas, las bajadas entre piedras con mucho arbusto cerrado. Carrera muy de andar rápido sin descanso.

Calor, ufffff, a primeras horas no tanto pero mucha humedad. Luego se corre por sombra y se va bien, pero a partir de medio día un calor... chorreaba sudor. La organización monto unos cuantos avituallamientos de más porque realmente era necesario. Sude como pocas veces. El calor se me da muy mal y era lo que más temía. Me hidrate bien, llevé gorra todo el camino y Capi conocía las pocas fuentes que había por el camino. Mucho beber y mucho mojarse la cabeza con agua para refrescar.

A falta de 14 kilómetros nos encontramos con un chico sentado en una piedra. Capi le pregunta si está bien y este contesta en inglés no hablar Español. Yo le pregunto en inglés y me dice que esta baldado, que no se esperaba que fuera tan duro y que se ha sentado para recuperar un poco. Tras unos instantes de descanso le animamos a venirse con nosotros y le pregunto de donde es. Me dice que de Suecia... Qué posibilidades hay de que el único Sueco de la prueba se encuentre con el único Español que habla Sueco (no creo que muchos más hablaran Sueco)? Increíble. El sueco nos siguió un par de kilómetros pero decidió ir por su cuenta un poco más despacio para aguantar hasta el final.

A falta de 8 kilómetros le digo a Capi que se acabo el reservar y que ahora tocaba tirar de orgullo. Aumento la velocidad al subir por la cuesta del paso del burro (2 kilómetros de subida) y Capi aun cansado me sigue el ritmo sin demasiada dificultad. La bajada la hacemos de vértigo. Yo ya suelto lo que me queda y me lanzo a tope como me gusta hacer al final de las pruebas. Capi es mucho más ultrero que yo y me dice que no suele hacer estas cosas ya que nunca se sabe si al final alargan o no y que en ultra no se suele hacer. Sea como sea se lanza y los dos disfrutamos como enanos esta última bajada.

Dos kilómetros de asfalto quedan y le insisto a Capi de mantener el ritmo. Con esfuerzo pero con mucha ilusión nos salen los kilómetros a 4'30" y disfrutando por poder acabar con tan buenas sensaciones.

Llegamos a meta casi al sprint y nos damos un fuerte abrazo. Quedamos en darnos una ducha y comernos una merecida paella que nos corresponde como participantes de la prueba. Llego al coche y se me ha olvidado llevarme ropa de recambio. Decido irme a Gandía a ducharme y volver...

En casa me meto el la piscina para enfriar las piernas, subo a casa a ducharme y me entra el bajón. 
Estoy muerto. No puedo volver a Xeraco. Me doy un paseo a mi pizzería favorita, Etna, me como la mitad de la pizza ya que no me entra más y me vuelvo a casa a dormir. 9 horas más tarde me despierto muy entero, me doy un paseo hasta el final de la playa descalzo y a continuación recojo mis cosas y me vuelvo a Madrid donde me espera la familia.

La carrera no está mal. Me encantó recorrer las mismas sendas que suelo hacer en solitario cuando voy a Gandía, me encantó correr para disfrutar sin ir al límite, me encantó correr con Capitan, primero por pasármelo genial con el y como el conocía a absolutamente todo el mundo, estos  nos animaban como a los que más. Durante tantas horas nos pudimos contar muchas cosas y pudimos disfrutar de lo que nos une a ambos que son las montañas. Capi se conocía cada subida, cada bajada, cada roca que sobresalía, el mote de cada senda, el detalle que cada pueblo que pasamos...

Por suerte nos teníamos el uno al otro para hablar porque en la inmensa mayoría del tiempo estuvimos siempre solos. Ni un solo corredor por delante no por detrás.

En cuanto a la carrera eché en falta un poco más de variedad y además para hacer tantos kilómetros hay que dar muchas vueltas por los mismos sitios. A Monduber solo subimos una vez pero toda la carrera da vueltas a las faldas de esta continuamente. No hubo apenas kilómetros de asfalto ni de pista, eso es de agradecer. Los avituallamientos planificados a mí entender insuficientes para el calor que hacía pero como habían colocado unos cuantos más no hubo problema alguno.

Eche de menos un poco de balizaje pero en general bastante bien. Un 10 a todos los voluntarios, eran escasos pero de verdad, un encanto de gente que anima y anima y ayudan en todo lo que pueden. Solo comí bocadillos y geles que yo mismo llevé pero en los avituallamientos había de todo (bocadillos, bollería, chuches, barritas energéticas, coca cola, acuarios, etc.)

No creo que la volveré a correr pero animo a todo el mundo a conocerla. Monduber está a 842 metros por encima del nivel del mar y no parece demasiado pero en verano más de una vez he tenido que bajar sin coronar ya que realmente tiene su aquel. Subimos por la crestería que es lo espectacular con vistas al mar y hay zonas realmente montañeras y espectaculares. En general montaña muy del mediterráneo.

Ni el puesto ni el tiempo final es de presumir pero pensando en el objetivo creo que no está nada mal. Hoy es lunes y tengo las piernas perfectas. Un par de días de descanso y vuelta a los entrenos.
136 participantes que tomaron la salida, llegados a meta 101 (35 abandonos, seguramente por el calor). Puesto final 53 y Capitan 52 con el mismo tiempo. Se ganó en 8 horas peladas. Nosotros le dedicamos 12 horas y 38 minutos. Había previsto unas 14 horas para llegar antes de anochecer.

Solo 4 super héroes bajaron de 9 horas y solo ocho más por debajo de 10 horas. Estoy muy contento con ser finisher ya que ha sido una prueba francamente durilla sobre todo teniendo en cuenta el calor.

La próxima en 15 días en el derbi de las aficiones. 10kilómetros entre el Bernabeu y el Calderon. Casi lo mismo J

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